Los tacones que lleva son enormes, con una punta muy larga, pero nada como la polla que le gustaría recibir. No sabemos si la del video es suficiente, pero es lo que necesita ahora y espera que él se la dé. Por eso se sube sobre una mesa y se abre de piernas, así el tío puede meterle todo su rabo en ese coñito hermoso, que ella ha preocupado de lubricar con su propia saliva cuando se lame los dedos y se toca delante suyo. Si espera hasta el final habrás visto un monto de cosas, pero lo mejor es como baña su rostro de lefa.