Paja con una madura de labios rojos
Cogiendo un bote de lubricante, ella comienza a preparar las cosas para esta pajota. Se nota que sabe lo que hace, en especial porque puede hacer que un hombre se corra solo con sus manos y sin utilizar sus labios. Lo cual es paradójico teniendo en cuenta que los lleva pintados de color rojo furioso y que se ven lo suficientemente seductores como para que los use para algo en especial. Pero hoy nos deberemos conformar con su paja, que acaba justo encima de sus pechos. Algo que para ella es motivo para usar esta crema como si fuera una loción de cuerpo y esparcirlo por todo su pectoral.